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ara un trabajo sobre la creación en el curso de Religión, no encontraba por ningún mercado o tienda algunos muñequitos que podrían representar a Adán y Eva, por lo que no me quedó otra cosa que hacerlos con cerámica en frío.
Además, le agregué un arbolito que se usa para el nacimiento en Navidad y con papel crepé formé las manzanitas. Y listo!!!
Conozcamos a Adán y Eva
Vamos a imaginar una historia muy antigua que nos cuenta sobre los primeros dos niños que vivieron en un jardín maravilloso.
Adán y Eva eran sus nombres, y vivían en un lugar lleno de árboles con frutas deliciosas, flores de todos los colores y animales amigables. Este jardín se llamaba Edén y era un regalo de Dios para ellos.
Dios les dijo: “Pueden jugar, correr y comer de todas las frutas del jardín, excepto una. Hay un árbol muy especial, el árbol del conocimiento del bien y del mal, y de ese árbol no deben comer”.
Adán y Eva tenían todo lo que necesitaban y eran muy felices, pero un día, se sintieron curiosos por la fruta que Dios les había dicho que no comieran. Aunque sabían que no debían, decidieron probarla.
Cuando comieron la fruta, se dieron cuenta de que habían desobedecido a Dios y se sintieron muy tristes. Dios les explicó que porque no siguieron su única regla, tendrían que dejar el jardín de Edén.
Aunque Adán y Eva tuvieron que irse del jardín, aprendieron una lección importante sobre escuchar y obedecer. Y aunque cometieron un error, Dios nunca dejó de amarlos y cuidarlos.
Así que niños, esta historia nos enseña que todos podemos cometer errores, pero lo importante es aprender de ellos y recordar que siempre hay amor y esperanza para nosotros. 🌿✨
¿Qué les parece si dibujamos cómo imaginamos que sería el jardín de Edén? ¡Pueden usar sus colores favoritos y llenar el jardín con muchas frutas y animales! 🎨🍎🐒